Ir al contenido principal

Street Mission: opinión y consejos sobre la nueva atracción de Port Aventura

Port Aventura World, el famoso parque temático situado entre Vilaseca y Salou (Tarragona), estrenó hace un par de meses temporada nueva y lo ha hecho regresando por la puerta grande con su nueva atracción: Street Mission. Se trata de una dark ride (la primera del complejo), ubicada en la zona de SésamoAventura, en la que  los protagonistas son los personajes del mítico programa de Jim Henson, Barrio Sésamo (Sesame Street, en su versión original). Para ello, Port Aventura no ha escatimado en gastos y ha recreado con todo lujo de detalles y un toque muy cartoon el famoso barrio televisivo con el que crecimos muchos de los que nacimos en los 70 y los 80.

La nueva zona, que supone una nada desdeñable ampliación del área del parque destinada a los más pequeños, ha sido obra de las empresas oscenses Tecmolde y Shu Digital bajo la supervisión del propio parque y de Sesame Workshop, una organización estadounidense sin ánimo de lucro cuyo objetivo es la difusión en el mundo de Barrio Sésamo y de los valores inherentes al programa. Tuve la suerte de probar Street Mission hasta dos veces durante mi última visita al parque hace un par de semanas con motivo de mi cumpleaños, y salí tan encantado de la experiencia que he creído que sería una buena idea compartir mi opinión en el blog. 

La nueva atracción consta de un pre-show en el que Coco, que en esta ocasión hace las veces de detective, es el gran protagonista. Mientras hacemos cola (y creedme, ¡el tiempo de espera para entrar puede llegar a ser tremendamente largo!), vamos pasando por una oficina de detective perfectamente aderezada con todo tipo de detalles que hacen alusión al famoso programa infantil. Llegados a un cierto punto, un alocado animatronic del detective Coco incluso nos da la bienvenida y nos explica que han desaparecido unas galletas de manera misteriosa... ¡¿Quién se hallará tras tamaña fechoría?!

Una vez en la atracción en sí, debemos ponernos unas gafas 3D y subirnos en un vagón que simula un taxi y en el que pueden subir hasta un máximo de seis personas, por lo que resulta ideal para disfrutar en familia o con amigos. Cada uno de los participantes dispone de una pistola con la que deberá ir apuntando y disparando a las galletas que irán apareciendo a lo largo del trayecto. La duración del recorrido apenas llega a los cinco minutos, pero realmente es una atracción que vale la pena. Se trata de una experiencia inmersiva gracias a la tecnología de video mapping en 3D sin parangón en España. No quisiera adelantar nada pero solo digo que, en caso de ser adultos, os preparéis para una buena dosis de nostalgia, puesto que veréis a los principales personajes que tantas cosas nos enseñaron y que tanto nos hicieron disfrutar de peques. No falta ni uno: Triki (también conocido como el monstruo de las galletas), Epi, Blas, el Conde Draco, Elmo y, por supuesto, Coco cuyo personaje es el hilo conductor de la historia. Todos ellos son perfectamente recreados mediante animaciones 3D o animatronics idénticos a las marionetas utilizadas en el programa. 

No voy a entrar en spoilers pero para mí la parte más divertida (y movida) de la atracción es el momento en el que nos adentramos en el castillo del Conde Draco. Aquellos que ya la hayan probado sabrán de lo que hablo... Tal y como he apuntado, la atracción es corta, pero ya se sabe: lo bueno, si breve, dos veces bueno. Y más en esta ocasión, ya que hacia el final del trayecto podemos ver una pantalla con la clasificación de los ocupantes del taxi según el número de galletas capturadas. Si queréis ganar, aquí tenéis un truco: ¡disparad a las galletas de mayor tamaño!

Así que ya sabéis, si tenéis planeado visitar Port Aventura, no dejéis de probar Street Mission. Y si no lo teníais previsto, dicha atracción supone una excusa perfecta para hacerlo ya que hará las delicias de los más peques y de los que no lo son tanto...


UN PAR DE CONSEJOS...

Dada la novedad, las colas para Street Mission pueden llegar a ser muy largas. Si queréis ahorraros algo de tiempo, os recomiendo que vayáis a primera hora cuando abra el parque a las 10 de la mañana. Otra hora buena para evitar colas es hacia el final del día poco antes de que el parque cierre (en temporada de verano a las 22h, el resto de la temporada a las 20h).

Si no os importa rascaros el bolsillo, existe la posibilidad de adquirir un pase express llamado Express Max Fun. Es relativamente económico (25€ por persona) comparado con el resto de pases existentes e incluye acceso directo a El Diablo, Angkor, Silver River Flume, Grand Canyon Rapids y, por supuesto, Street Mission. Es un pase destinado básicamente al público familiar ya que se tratan de atracciones ideales para subir con niños, por lo que es una buena opción si vais en familia. Una de las veces que probé Street Mission fue a través de este pase y no tardé ni un minuto en subir.

Comentarios

  1. Me encanto la parte en la cual pusieron los Hinchables en Alicante, gran servicio del parque les encanta a los mas pequeños

    ResponderEliminar
  2. Existen multitud de actividades de ocio con la que tanto mayores y pequeños se pueden entretener, aparte de visitar un parque temático podemos realizar otros deportes de estrategia como el airsoft. A este deporte se juega por equipos, se desarrolla una estrategia para ganar a tu rival y consigue la victoria el equipo que acaba con más contrincantes o cumple más objetivos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Lo más visto de la semana

Hangeul: el alfabeto coreano

A diferencia de sus vecinos chinos o japoneses, a la hora de escribir los coreanos no utilizan los  ideogramas  que a la mayoría de occidentales se les antojan enrevesados e ininteligibles. En la península coreana cuentan con su propio alfabeto llamado hangeul (o hangul). Se considera uno de los alfabetos más eficientes y concisos del mundo, lo que le ha merecido elogios por parte de muchos lingüistas debido, principalmente, a su funcionamiento científico y racional: "El hangeul debe ser considerado uno de los mayores logros intelectuales de la humanidad." Geoffrey Sampson, lingüísta y profesor, Universidad de Sussex "El hangeul es el mejor sistema de escritura del mundo ya que se fundamenta a partes iguales en principios filosóficos tradicionales y en teorías científicas." Werner Sasse, profesor, Universidad de Hamburgo "El hangeul es el sistema de escritura fonémica más avanzado del mundo y se sitúa por delante del alfabeto latino." Umeda Hi

"Allévoy": la desastrosa localización de Final Fantasy VII

Allá por 1997 llegó al mercado español un videojuego que habría de hacer historia. El videojuego en cuestión, Final Fantasy VII , supuso en efecto un antes y un después en varios aspectos: fue la aceptación definitiva por parte del gamer  español (y occidental, en general) de un género como el juego de rol japonés (JRPG), hasta entonces con una cuota de mercado más bien reducida; para Sony significó el espaldarazo definitivo para su recién nacida Playstation, que veía consolidado su catálogo con un videojuego que el devenir convertiría en obra de culto; y para los traductores sentó un precedente en la aún incipiente localización de videojuegos. Y no precisamente en el buen sentido... A día de hoy, no hay gamer español que se precie de ser llamado tal al que no le suene el "allévoy" de Cloud, el protagonista del juego. Y es que, por si algún lector despistado aún no se ha percatado, la localización al español de la obra de Squaresoft se convirtió en un ejemplo de cómo no tra

El español en las calles filipinas

Si caminando por las calles de una ciudad se encontrara en calles llamadas  TORDESILLAS, BENAVIDEZ, URDANETA, DURANGO y PADRE BURGOS, y se viera en ciudades llamadas PAMPLONA, TOLEDO, PONTEVEDRA, CORDOBA, SANTANDER, BARCELONA Y CUENCA, podría pensar perfectamente que se encuentra en España, ¿no es así? Y si fuera a viajar por ciudades llamadas NUEVA ECIJA, NUEVO MEXICO, NUEVO LEON, o por otras llamadas PROSPERIDAD, LA PAZ,  ESPERANZA, e incluso por ciudades llamadas LOS BAÑOS, y LAS PIÑAS, por no nombrar otros como SAN IDELFONSO, SAN RAFAEL Y SAN ANDRÉS , y se encontrara de nuevo en calles llamadas BUENAVISTA, BUEN CAMINO, BIEN UNIDO, Y ESPAÑA , podría en este caso estar en algún país que hubiera sido colonia de España, ¿no es verdad?  Pero si continuara su camino y encontrara un cartel por la calle en el que pusiera METRO GWAPO , un letrero por detrás de un camión en el que pusiera DISTANSYA AMIGO , una señal de un hospital escrito OSPITAL , y una farmacia cuyo

Los tres "idiomas" de Bosnia-Herzegovina

Lingüísticamente hablando, como practicamente en todas los aspectos, Bosnia-Herzegovina se encuentra hoy dividida. Sin embargo, la fragmentación lingüística es solamente simbólica. Hasta la desintegración de Yugoslavia a principios de los 90, el serbocroata era una lengua estandarizada con dos variantes (la occidental o croata, y la oriental o serbia) y dos variedades (la hablada en Bosnia-Herzegovina y la hablada en Montenegro). Las variantes contienen muchas palabras exclusivas e inexistentes en la otra, mientras que las variedades toman elementos de ambas variantes. El serbocroata seguramente se habría dividido en croata y serbio mucho antes si no hubiera sido por la situación multiétnica de Bosnia-Herzegovina. La tesis de "una nación, un idioma" no funcionaba en Bosnia ya que los miembros de todas las naciones hablaban la misma variedad de la lengua bosnia. Nadie podía distinguir a un serbobosnio de un bosnio musulmán o croata tan sólo por su manera de hablar. La leng

Soliloquio de Fernanda del Carpio

Rescato en el día de Sant Jordi de hoy este fragmento de la gran obra de Gabriel García Márquez "Cien años de soledad", en el que la altiva y a la vez incomprendida Fernanda del Carpio, mi personaje favorito de la novela, estalla y, a modo de soliloquio, empieza a soltar lo que su viperina lengua ha callado durante tanto tiempo: Aureliano Segundo no tuvo conciencia de la cantaleta hasta el día siguiente, después del desayuno, cuando se sintió aturdido por un abejorreo que era entonces más fluido y alto que el rumor de la lluvia, y era Fernanda que se paseaba por toda la casa doliéndole de que la hubieran educado como una reina para terminar de sirvienta en una casa de locos, con un marido holgazán, idólatra, libertino, que se acostaba bocarriba a esperar que le llovieran panes del cielo, mientras ella se destroncaba los riñones tratando de mantener a flote un hogar emparapetado con alfileres, donde había tanto que hacer, tanto que soportar y corregir desde que amanecía